Una serie de tornados azotó este miércoles a Chicago y generó daños en viviendas, comercios y vehículos ubicados en distintos puntos de una de las ciudades más pobladas de Estados Unidos.
Uno de ellos, por caso, tocó tierra cerca del Aeropuerto Internacional O’Hare y obligó a pasajeros a resguardarse. Si bien no hubo reportes de heridos, el fenómeno provocó la cancelación de 169 vuelos y demoras en otros casi 500, de acuerdo al sitio de seguimiento de vuelos FlightAware.
De acuerdo a información de medios locales, otro tornado, al que definieron oficialmente como “grande y extremadamente peligroso”, aterrizó en áreas cercanas a Stickney y Berwyn, en las afueras de la ciudad.
El Servicio Meteorológico Nacional emitió dos alertas de tornado para partes de la ciudad la noche del miércoles. En Chicago se activaron en al menos dos ocasiones las alertas para advertir a la población que se resguardara en un lugar seguro.
Para las 8 de la noche, aquel servicio aseguró que el área de Chicago estaba “de momento libre de alertas”. Miles de clientes habían sufrido cortes de electricidad después de las tormentas y se registraron daños estructurales desde Campton Hills hasta South Elgin.
“Este tornado ha estado tocando tierra de forma intermitente hasta el momento y se desplaza hacia el este. Hay circulaciones (de aire) adicionales a lo largo de la línea al sur de O’Hare. Si usted se encuentra en la zona cubierta por la advertencia, resguárdese», señaló oportunamente esa agencia.
Un video transmitido por varias cadenas de televisión mostraba a cientos de personas que se resguardaban en un vestíbulo del O’Hare.
Lynn Becker, residente de Chicago desde hace varios años, tuiteó un video en el momento en que se activaron las sirenas de tornado en todo el emblemático paisaje de la ciudad.
“Vivo en un edificio de apartamentos de 60 niveles así que mis opciones son un tanto limitadas”, dijo. “Supongo que tenemos que dirigirnos al centro del edificio”.
Además, apuntó: “Hay cierto pánico cuando se está viendo una pantalla de televisión y todo está en rojo… aunque la esperanza es que los daños sean mínimos”.
Según declaraciones de un administrador de emergencias al meteorológico, un techo se desprendió en la comunidad de Huntley, en el condado McHenry, y una persona capacitada como vigía climático dijo que hubo caída de árboles y techos en el condado Cook, en el que se ubica Chicago.
Además, según precisó NBC Chicago, algunos almacenes ubicados en el sector oeste del aeropuerto resultaron dañados.
Un fenómeno que se repite en Estados Unidos
Un tornado que azotó el sureste de Missouri el pasado 5 de abril, causó una destrucción generalizada y mató e hirió a varias personas, dijeron las autoridades. El fenómeno atravesó un área rural del condado de Bollinger, a unos 80 kilómetros al sur de St. Louis, entre las 3:30 y las 4 de la mañana, dijo el sargento Clark Parrott, de la Patrulla de Caminos del Estado de Missouri, quien agregó que registraron «múltiples lesiones y múltiples muertes».
Unos días antes, al menos 18 personas murieron por los fuertes tornados que azotaron en las últimas horas el medio oeste y sur de Estados Unidos. Miles de clientes se quedaron sin servicio de electricidad y hasta colapsó el tejado de un teatro en el que unas 260 personas asistían a un concierto de heavy metal.
En Little Rock, la capital de Arkansas, unas 2.000 viviendas se vieron dañadas por los tornados y al menos 30 personas han sido hospitalizadas, según el alcalde Frank Scott Jr.
“Sabemos que los vecinos de Little Rock son resilientes y superaremos esto juntos», afirmó el alcalde de Little Rock, Scott Jr., en un vídeo en Twitter, en el que aún podría escucharse al viento soplar con fuerza.
Además de los daños humanos y de infraestructuras, los tornados han dejado a unos 60.000 hogares sin electricidad en Tennessee y 37.000 en Arkansas, dos de los estados más afectados, según los datos de la web PowerOutage.us, que monitoriza este servicio.
