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Mirando sin mirar a octubre 2025 y sin hablar de recesión / Emiliano Damonte Taborda

La actualidad de los partidos políticos tras la fragmentación que dejaron las elecciones 2023 dejan adivinar poco sobre le futuro, hay una descomposición que permite suponer una nueva configuración del poder, todo hasta que se empiece a jugar por los puntos, un partido de truco; inflación en valores altos y economía aplastada y sin reacción, una combinación letal; de cara a 2025 empieza a definirse un escenario en el que al Gobierno le preocupa la palabra “recesión”; usinas de relato; el tren fantasma atrincherado en el conurbano; el interior peronista que no se le atreve a un kirchnerismo herido de muerte

 
 
Guillermo Francos, el habilísimo
Guillermo Francos, el habilísimo
 
 

Francos armando poder

El Gobierno hoy sigue profundizando su politización y el habilísimo Guillermo Francos comenzará la dura misión de convencer a la oposición dialoguista de que las PASO deben derogarse. Mientras, Caputo se sentará con Jorge Macri para buscar un acuerdo con el Gobierno Nacional respecto a la Coparticipación de la Ciudad. La estrategia es un poco ganar terreno presentando pretenciones de máxima, a priori inalcanzables, con objetivos reales bien claros y mejor disimulados. 

 

El Gato de Schrodinger 

Política pura. Por esto mismo no hay que tomarse en serio nada, o mejor expresado, hay que dudar de todo lo que aparezca como muy claro. A ese campo pertenece la escisión del PRO entre afines al Gobierno e Independentistas, como a ese plano pertenece el enojo de Macri por los presuntos desplantes sufridos el 9 de Julio, en ocasión de la firma del Pacto de mayo. El PRO hoy es un poco como el gato de Schrodinger dentro de la caja, en estado de superposición cuántica, a favor del Gobierno y marcándole el paso al Gobierno como oposición, dividido y unido, todo al mismo tiempo. Quien no entienda que esto es posible no sabe de física cuántica, pero tampoco de política.

 

¿Otro amague del Peronismo de las provincias?

Hay rumores de un posible armado Peronista por fuera del kirchnerismo y eso es una gran noticia para el Gobierno, por eso de divide y reinarás, pero también se trataría de la posibilidad de encontrar un interlocutor válido en algún sector al que por el momento no ha tenido acceso y que encontraría su validación justamente en una relación con el Gobierno Nacional. Ampliar la base, que es exactamente lo que con habilidad está tratando de hacer Guillermo Francos. Se habla de Raúl Jalil (Catamarca), Martín Llaryora (Córdoba), Gustavo Sáenz (Salta), Claudio Vidal (Santa Cruz), Alberto Weretilneck (Rio Negro) y Osvaldo Jaldo (Tucumán), herederos todos ellos de lo más rancio de la política de las provincias, que perciben que en este escenario de debilidades es posible saltar un par de líneas y quedar mejor parados de cara al futuro. Personalmente me suena a “Corte de los milagros” y creo que el Peronismo de las provincias se queda siempre por el camino, tratando de cuidar sus gigantescos privilegios locales. Pero esta vez un Gobierno Nacional necesitado de poder y un kirchnerismo herido de muerte podrían despertar la fuerza que no tuvieron en su momento tipos como el santafesino Perotti o el célebre Schiaretti, entre otros ilustres caudillos que terminaron prefiriendo no enfrentar a Cristina.

 

Conurbano, sede orgullosa del Tren Fantasma

La Cámpora rancia se sigue peleando por los despojos con Kicillof, mientras Clerici declara en la causa por enriquecimiento iniciada a Insaurralde y Espinoza fortalece su liderazgo entre los intendentes a descápito del procesamiento por abuso sexual que se le dictó. De Chocolate Rigau por el momento no se acuerda nadie. El conurbano bonaerense, lugar en el que se gestan las victorias electorales locales y nacionales, parece el paraíso de la impunidad. Recuerdo a Mario Ishi hablando del reparto de falopa en las ambulancias de su municipio durante la pandemia, y corro a confirmar quién es el intendente de José C. Paz hoy en día. Adivinen… Mario Ishi. De aquí parecería que no puede salir nada interesante. Sin embargo, a la hora de hacer las cuentas, ese infierno de marginalidad, pobreza y corrupción en el que han transformado al mundo diario de millones de argentinos, es el que define. Ni el PRO, ni LLA, ni la UCR han sido capaces de plantear una alternativa válida, y tras la sorpresa que significó la victoria de Vidal en 2015, el aparato de poder funcionó con precisión y Kicillof metió dos gestiones al hilo. Ahora habrá que ver si, con menos fondos para gerenciar la pobreza, ese mismo aparato, herido pero no desactivado, será capaz de revertir la sorpresa que le dio Milei en las presidenciales.   

 

Cuestión de plata

De la discusión entre Caputo y Jorge Macri surgirá gran parte de la posición del PRO de cara al futuro próximo, y esa es una carta que se jugó bien el Jefe de Gobierno porteño. Era ahora, antes de empezar a hablar de relaciones carnales o de oposición constructiva. La interminable discusión sobre la Ley de Bases le permitió al Gobierno Nacional esbozar un perfil de gestión política, y a sus interlocutores entender cómo manejarse. Hasta ahora da la sensación de que la manera de actuar es la de asegurarse la bocha antes. Así que si se va a hablar de algo, que sea con la coparticipación en casita, ya resuelta. 

 

No se hable de recesión

Mientras tanto, el dólar coquetea con los 1500 (parece que al dólar no le importa que no le importe a Adorni) y la inflación está todavía en niveles inaceptables que con una cruel caída de la actividad empieza a permitirnos hablar, ya sin tapujos, de recesión. Palabra maldita de la que no se quiere hablar, y para eso fue de gran utilidad la Copa América y las denuncias de la Federación Francesa de Fútbol, y Enzo Fernández y la vicepresidente bancando. Incluso las amenazas de Irán en concomitancia con el aniversario del ataque a la AMIA pueden servir para mantener la palabra “recesión” lejos de los titulares, o el atentado contra la vida del ex presidente Donald Trump, puede ayudarnos a evitar decir “recesión”. Porque si la inflación baja, pero no repuntan la producción y el empleo, no vamos a ningún lugar. 

 

Más “micro”

Se viene sin dudas el semestre más bravo para la gestión de Mieli, que hasta ahora se había encontrado protegido por un capullo compuesto por confianza ciega, actividad residual, horror por el “tren fantasma” y gran habilidad comunicacional. Ahora deberá aguzar el ingenio para que los cambios que efectivamente se llevaron a cabo, comiencen a generar algún efecto positivo en la producción y en la “micro” (definida en oposición a la “macro”). Se trata de favorecer la producción y la generación de empleo de manera genuina, nadie habla de imprimir y tirar guita a la calle, eso ya está claro que nos ha hundido, que Massa no se entusiasme, pero se trata de crear condiciones reales y no solo postulados. Se supone que la función de Sturzenegger en su flamante cargo está en línea con estos objetivos. A fin de año ya habremos entrado en carrera hacia octubre 2025 y las elecciones de medio término, y acá volvemos a la negociación de Francos con la oposición y la posibilidad de eliminar las PASO, lo que en un panorama de fragmentación política como la que vivimos, significaría un despelote para lo que queda de los partidos políticos, sin personajes fuertes y liderazgos claros.    

 

Salutación

Por ahora entonces, usar poco el auto que aumentó la nafta y cuidamos el medioambiente, calefaccionar agudizando el ingenio, usar frazadas pesadas, comprar con inteligencia y siempre aprovechando las cuotas sin interes, leer varios diarios y portales para no perder de vista el hilo, no olvidarse del pasado, no comprar el futuro, ser filosos en el análisis del presente, y más que nunca: solidaridad, empatía, respeto por la dificultad del otro, generosidad y paciencia, espíritu crítico que más no se pueda, ojos abiertos y equilibrio emocional, les augura El Aguijón.

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