La misión argentina se reúne este lunes en Washington con el Fondo. El organismo pidió ajustar las estimaciones de inflación y el gabinete económico se reunió contrarreloj el fin de semana. Se puede resumir que para empezar a acordar el Gobierno debe mejorar la inflación con políticas monetarias y corregir el déficit fiscal, justificando con que fondos lo cubrirá.
La misión argentina integrada por funcionarios del Ministerio de Economía y el Banco Central ya está en Washington para reunirse hoy con el equipo técnico del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Luego de que la directora del organismo, Kristalina Georgieva, advirtió horas antes del arribo de la delegación argentina: «aún queda mucho por hacer», hubo una reunión de último momento el viernes a la noche del equipo económico para ajustar proyecciones macroeconómicas para 2022.
La estimación de Martín Guzmán de una inflación de 33% para 2022 fue uno de los puntos que objetó el staff del organismo.
En esa línea, desde el FMI -que siguen informes como el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM), que elevó su proyección de inflación para 2022 a 52,1%- señalaron que el objetivo del Acuerdo de Facilidades Extendidas debe ser: «mejorar significativamente los fundamentos macroeconómicos de la Argentina y colocar al país en una senda sólida para recuperarse de esta crisis».
El objetivo de la Casa Rosada, según trascendió, es enviar el proyecto de plan plurianual y acuerdo con el FMI al Congreso el 15 de diciembre.
Previamente, los equipos técnicos de ambas partes deben acordar los detalles del programa para que el Fondo ponga el principio de acuerdo a consideración del directorio.
Las dos principales exigencias que enfrenta hoy la Argentina son en torno a la inflación y el déficit fiscal.
En primer lugar, los especialistas del Fondo consideran fundamental corregir la inflación con políticas monetarias como una suba de la tasa de interés.
En segundo lugar, pese a que aceptarían una baja gradual del déficit fiscal, a lo largo de dos o tres años, el problema del rojo fiscal de 3,3% que proyecta Guzmán para 2022 es que en su mayoría cree que será financiado con nuevos créditos de organismos internacionales, además de emisión monetaria.
La magnitud del crédito de u$s 44.000 millones que otorgó el FMI hace que un posible default argentino no sea negocio para ninguna de las dos partes.
Reservas al límite: ¿cuándo calcula el mercado que se agotan?
Nuestro país en el primer trimestre de 2022 enfrenta vencimientos por u$s 7500 millones entre capital e intereses, en un contexto en el que las reservas netas del Banco Central son aproximadamente u$s 4500 millones.
Reuniones de último momento:
Ante las pronunciaciones negativas del Fondo, Guzmán y Matías Kulfas se reunieron este viernes a la noche con sus secretarios Roberto Feletti y Fernando Morra. Trabajaron en el rediseño de políticas para bajar los precios en 2022 y llevar una respuesta al FMI.
«Será importante fortalecer los acuerdos de precios en 2022 para atacar el componente de inercia en el proceso inflacionario y que contribuya como un ancla más en el proceso de reducción de la inflación», explicó a este medio un funcionario que participó en la reunión, y agregó: «El tema de los acuerdos de precios está incluido en las discusiones que tienen lugar con el staff del FMI».
Mientras tanto, esta será una semana clave en la que se definirán nuevas medidas para contener las subas de la carne. Para noviembre, se espera que el índice de Precios al Consumidor (IPC) se vuelva a ubicar por encima del 3%.