MOSCÚ, (Reuters) – El principal asesor de política exterior del presidente ruso, Vladimir Putin, declaró el jueves que le había comunicado a Washington que un alto al fuego de 30 días propuesto por Estados Unidos para pausar la guerra en Ucrania simplemente daría a las fuerzas de Kiev un respiro muy necesario en el campo de batalla.
Los avances de Rusia en el frente desde mediados de 2024 y el intento del presidente estadounidense, Donald Trump, de alcanzar un acuerdo de paz para poner fin al conflicto de tres años en Ucrania han generado temores de que Kiev, respaldada por Occidente, pueda perder la guerra.
El enviado especial de Trump para Oriente Medio, Steve Witkoff, llegó a Moscú el jueves para conversar.
Funcionarios rusos informaron que el asesor de seguridad nacional estadounidense, Mike Waltz, había proporcionado detalles sobre la idea del alto el fuego el miércoles y que Rusia estaba dispuesta a discutirlo.
Trump había declarado en la Casa Blanca el miércoles que esperaba que el Kremlin aceptara la propuesta estadounidense de un alto el fuego de 30 días, que Ucrania afirmó apoyar.
Yuri Ushakov, ex embajador en Washington y portavoz de Putin en importantes temas de política exterior, declaró a los medios rusos que había hablado con Waltz el miércoles para exponer la postura de Rusia sobre el alto el fuego.
«He expresado nuestra postura de que esto no es más que un respiro temporal para el ejército ucraniano, nada más», declaró Ushakov.
«No nos aporta nada. Solo les da a los ucranianos la oportunidad de reagruparse, fortalecerse y continuar con lo mismo», añadió posteriormente. Ushakov afirmó que el objetivo de Moscú era «una solución pacífica a largo plazo que tenga en cuenta los legítimos intereses de nuestro país y nuestras conocidas preocupaciones».
«Me parece que nadie necesita medidas que (simplemente) imiten acciones pacíficas en esta situación», declaró.
Al preguntársele si Rusia rechazaba, por lo tanto, la propuesta estadounidense, Ushakov, quien ha servido junto a Putin en el Kremlin desde 2012, afirmó que el presidente probablemente hablaría con los medios de comunicación más tarde el jueves y detallaría la postura rusa.
Las declaraciones de un funcionario tan alto del Kremlin indican que Putin, líder supremo de Rusia desde 1999, cree que los avances de Rusia en el campo de batalla en Ucrania y en el oeste de Rusia le otorgan a Moscú una posición sólida en las «negociaciones de paz».
Sin embargo, no estaba claro cómo reaccionaría Trump, tras declarar el miércoles que esperaba que Moscú aceptara un alto el fuego para poner fin a la «masacre» y que en su primer mandato había sido más duro con Rusia que otros presidentes.
«Puedo hacer cosas financieras que serían muy perjudiciales para Rusia», dijo Trump. «No quiero hacerlo porque quiero la paz. Quiero ver la paz y ya veremos. Pero en términos financieros, sí, podríamos hacer cosas muy perjudiciales para Rusia. Sería devastador para Rusia«.
Trump ha buscado reconstruir las relaciones con Rusia para evitar una escalada de la guerra en Ucrania que, según él, podría convertirse en una Tercera Guerra Mundial, aunque también ha mantenido la amenaza de más sanciones y la posibilidad de levantarlas si Moscú intenta poner fin a la guerra.
DURA POLÉMICA DEL KREMLIN
Apenas horas después de que Trump hablara en Washington, el Kremlin publicó imágenes de Putin vestido con un uniforme de camuflaje verde visitando la región de Kursk, en el oeste de Rusia, donde Ucrania está a punto de perder su posición tras una importante ofensiva de las fuerzas rusas.
Putin, ex oficial de la KGB, rara vez viste uniforme militar. El Kremlin afirmó que el comandante en jefe supremo de Rusia había considerado necesario usar el uniforme militar. Estados Unidos acordó el martes reanudar el suministro de armas y el intercambio de inteligencia con Ucrania después de que Kiev declarara en conversaciones en Arabia Saudita su disposición a apoyar una propuesta de alto el fuego.
Sin embargo, Rusia ha avanzado en el campo de batalla a pesar de los cientos de miles de millones de dólares en ayuda estadounidense y europea a Ucrania, cuyas fuerzas están siendo expulsadas de la región de Kursk, en el oeste de Rusia.
Más allá de la idea de un alto el fuego inmediato, Rusia ha presentado a Estados Unidos una lista de demandas para un acuerdo que ponga fin a su guerra contra Ucrania y restablezca las relaciones con Washington, según dos personas familiarizadas con el asunto.
Al ser preguntado sobre el informe de Reuters, Ushakov afirmó que Washington conocía la postura de Rusia.
En un intento por desviar las fuerzas rusas del este de Ucrania, ganar ventaja y avergonzar a Putin, Ucrania atravesó la frontera hacia la región de Kursk en agosto, el mayor ataque contra territorio ruso desde la invasión nazi de 1941.
Ucrania ahora posee una franja de menos de 200 km² (77 millas cuadradas) en Kursk, una reducción con respecto a los 1.300 km² (500 millas cuadradas) que tenía en el punto álgido de la incursión el verano pasado, según el ejército ruso.
