Tras un juicio cuyo fallo no fue apelado, se embargaron las cuentas de la institución que a partir de esta semana ingresaría en una situación crítica. Según sus titulares, ante esta situación no podrán pagar los sueldos de sus trabajadores.
El abogado Martín Jáuregui dio detalles del caso judicial que terminó con una condena firme contra esta institución de salud de Concordia, pero también contra un médico de Federación y contra el propio gobierno de la provincia de Entre Ríos.
“La situación de la institución es extremadamente compleja, yo me hice cargo de este conflicto con la situación ya decantada», aclaró el letrado, detallando que «el Instituto de Pediatría de Concordia tiene un juicio por mala praxis que se le inicia al doctor Carlos Alfredo Arizabalo, a la institución, al doctor Marcelo Javier Vera y al Superior Gobierno de la Provincia de Entre Ríos; por el fallecimiento de una nena el 10 de diciembre de 2013”, comenzó narrando el letrado.
En ese momento, “en Concordia estaba el estallido social, los saqueos y demás», generados por el resonante levantamiento policial. «En ese contexto, una nena de 12 años de Federación llega con un cuadro de peritonitis aguda y como el instituto no contaba con los medios en ese momento para la atención, se produce la derivación a la ciudad de Paraná”, precisó.
Sin embargo, el entrevistado detalló que “pese a los esfuerzos médicos no se puede evitar el deceso de la nena y esto provocó un juicio por daños y perjuicios, que termina con una importante condena en favor de los padres de la menor y lo extraño es que nunca se apeló ese fallo” por prte de los -entonces- abogados de la mencionada clínica.
Con el paso del tiempo, la sentencia quedó firme “y en este momento no tenemos más por hacer, por lo que provoca que el instituto sea embargado en sus cuentas; quedando totalmente inhabilitado de actuar en lo inmediato, es decir, dentro de las 48 hora venideras tendrá un futuro totalmente incierto”, remarcó.
Cuadro de situación actual
Jáuregui explicó que este cuadro de situación, “representa un gran problema para toda la sociedad de Concordia ya que siempre en el contexto de una pandemia como estamos, es indispensable contar con un centro asistencial abierto. De igual manera, para el personal que trabaja desde incluso hace más de cuarenta años en el instituto, para los médicos que tienen acciones en la empresa, para todos”.
Según afirma Jauregui, a partir de esta semana «el instituto no podrá pagar los sueldos, el pago de las obras sociales también quedará dentro del embargo y la situación del directorio es de desesperación”.
Fuente: www.diarioriouruguay.com.ar