Los testimonios recogidos durante la jornada doble del juicio por sedición que se sigue a 18 policías, permitieron reconstruir el incidente con disparos y la agresión a comerciantes en la Jefatura, ocurridos durante la revuelta de diciembre de 2013. Un sereno contó que por lo ocurrido, su pareja perdió un embarazo. También testimonió el periodista Horacio Osorio, publicó la agencia de Paraná APFDigital.
Entre la mañana y la tarde de este martes, el Tribunal de Juicio escuchó los testimonios de los comerciantes Alberto y Claudio Bertoldi, Horacio José Scheifler y Walter Kleiman (presidente del Centro Comercial) y también del guardia del centro comercial Roberto Domingo Díaz Ramos, los que con matices en cuanto a la precisión, permitieron reconstruir un incidente entre policías de civil y un grupo de comerciantes que habían montado barricadas en la peatonal, para protegerse de eventuales saqueos durante la noche del 8 y la madrugada del 9 de diciembre, jornadas en las que una protesta policial dejó a la segunda ciudad de la provincia sin servicio de seguridad ciudadana.
Los relatos de Alberto Bertoldi y Díaz Ramos incluyeron detalles sobre cómo aquella noche, un grupo de comerciantes, tras un incidente verbal con dos uniformados, recibieron la visita de un grupo de policías de civil, con quienes, armados, se produjo un incidente que incluyó disparos de arma de fuego.
Según dijeron ambos al tribunal, en medio de la discusión, Scheifler se acercó armado al lugar donde estaban discutiendo lo que provocó la reacción del grupo policial, de donde partió un disparo que no encontró afortunadamente ningún destino humano. Además, Díaz Ramos precisó que del grupo de los policías alguien apuntó con un arma en la cabeza a Scheifler; en su relato, el comerciante aumentó a tres el número de personas del grupo policial que le apuntaron a la cabeza.
Bertoldi mencionó que, en ese momento y junto a otras personas de ambos grupos, se interpone y pide calma.
EN LA JEFATURA
Producto de este incidente, Alberto Bertoldi conversó con un grupo de comerciantes sobre la posibilidad de ir a Jefatura a informarse de lo que estaba ocurriendo realmente, porque llegaban versiones en forma constante de hordas que podrían abatirse en cualquier momento sobre los comercios céntricos.
Pide a Kleiman que se sume, pero este se niega. “No era el momento de hablar en Jefatura porque había mucha gente en la calle”, frente a la sede policial, justificó el titular del Centro Comercial, quien prefirió quedarse en su negocio de calle Mitre, preservando sus cosas. Alberto Bertoldi, sus dos hermanos (Claudio era uno de ellos) y otro comerciante parte rumbo a Jefatura.
Son recibidos por un grupo de policías y familiares en la puerta. “Había gente muy exaltada”, recordó. Iniciaron un diálogo. “Le digo al que estaba en la puerta que éramos comerciantes y que queremos ayudar. El policía me dice que estaba bien lo que estamos haciendo. Pero viene gente de atrás y se desvirtúa todo”, comentó. Bertoldi dijo que escuchó: “Estos son los forros de la peatonal”. Luego lo golpean, le tiran una cubierta sobre la cabeza y lo empujan hacia atrás. Su hermano Claudio lo retira. El incidente quedó grabado en video por un camarógrafo de Canal 2.
Durante su testimonio, le mostraron a Alberto Bertoldi las imágenes. En el griterío, una voz sobresale y se alcanzó a escuchar: “Ahora te vas a dar cuenta lo que hace falta la policía”.
Díaz Ramos, en su testimonio, reflexionó: “En mi ciudad los que nos involucramos, vivimos 50 horas de terror. Yo no quiero que vuelva a pasar”. Y apenas conteniendo el llanto, apuntó: Perdí un hijo, un negocio. Mi novia estaba embarazada y perdió la criatura. Perdí dos pequeños negocios por todo esto. Me sacaron las bolsas con las mercaderías que tenía para empezar dos tiendas en el Centro Comercial, ni siquiera tenían nombre los locales”.
SITUACIÓN ANTICIPADA
Kleiman, por su parte, apuntó que la primera advertencia sobre lo que podría ocurrir, la recibió a las 17 del domingo, de boca de la titular de una cadena local de supermercados, quien le manifestó que no había policías haciendo las guardias. Ante esto, el Presidente del Centro Comercial decidió llamar a Gendarmería. Y también al secretario de Gobierno municipal, Juan Domingo Orabona, quien le dijo que estaba al tanto de la situación y que estaba bajo control.
En orden a esto, el periodista Horacio Osorio, director del portal Diario Río Uruguay, precisó que durante días anteriores y también durante la tarde del domingo, recibió insistentes llamados de medios de Concepción del Uruguay, Gualeguaychú y Paraná, preguntando si la Jefatura ya había sido tomada.
Asimismo, dijo que al arribar en horas de la noche a la sede policial una vez que la manifestación había ingresado “encuentro en la Jefatura, una dependencia del Estado donde había cierto orden que el domingo no existía, no había personal de referencia. Había una manifestación de personas que realizaba una protesta”.
Kleiman también mencionó que fue por su intermedio que se le dio intervención al Obispo Luis Collazul. Y narró que las conversaciones en Cafesg entre el gobernador Sergio Urribarri, sus funcionarios y los policías amotinados eran técnicas, pero no dio demasiados detalles porque dijo haber estado “entrando y saliendo” de la sala donde se realizaban las conversaciones.
