Concordia se sumará el 18 de febrero a la «marcha del silencio» por la memoria del fiscal Alberto Nisman. A un mes de su muerte, la convocatoria en la plaza 25 de Mayo es promovida por ASEC (Asamblea por la Seguridad de Concordia). “Queremos estar para decir: queremos justicia, estamos presentes y queremos saber la verdad”, afirmó su referente Guillermo Schmid.
Guillermo Schmid, integrante de ASEC, instó a la ciudadanía a participar. “Es hora de comprometernos, de asistir, de dar la cara, decir sin miedo ‘queremos saber la verdad’. Si no nos comprometemos no solamente nada va a cambiar sino que va a empeorar. Entonces el compromiso es fundamental, estar es fundamental. Todos los concordienses sin banderías políticas, sin ideologías, ni partidos tenemos que ir para buscar justicia, para que se sepa la verdad”.
ASEC resolvió adherir a la marcha de los fiscales el 18 de febrero, “frente a la nebulosa que rodea a este hecho tan grave. No es solamente un asesinato, para mí es un atentado a la democracia. Más allá de quien sea el culpable o el responsable pareciera ser que desde el gobierno en vez de querer activamente descubrir la verdad, tiene una actitud como que acá no pasó nada. O peor aún, como que quieren encubrir lo que ha pasado. Nadie puede admitirlo en un sano funcionamiento de la república. Si la república funcionara bien sería el gobierno el que busque con todos los medios a su alcance, incluso con la Inteligencia, al responsable de esto. Pero acá está pasando exactamente lo contrario. La gente está cansada de que todo se tape y quede en la nada como siempre ha pasado”, sostuvo Guillermo Schmid.
El desenlace trágico del fiscal “ha calado hondo en toda la sociedad y evidentemente tendrá una adhesión importante en todo el país”, expresó Schmid.
Sin embargo, portavoces del gobierno cuestionan la marcha como un nuevo ‘intento destituyente’. Sobre este punto, el referente de ASEC señaló: “Acá hay un fiscal muerto que denunció a la presidenta por el encubrimiento del atentado más grande de la historia argentina y hay un gobierno que ha tratado de ridiculizar y minimizar la denuncia del fiscal. Y muerto el fiscal está tratando todo el tiempo de desviar la investigación, lo dice la misma fiscal del caso, (Viviana) Fein. La realidad es que la gente quiere saber la verdad de lo que pasó y de lo que está pasando”.
La movilización por la extraña muerte del fiscal “excede la política partidaria, atañe al funcionamiento de la república y la división de poderes”, aseguró Schmid.
PROMESAS
Además del caso Nisman, Guillermo Schmid indicó que la asamblea recibió “el pedido de un montón de gente, a raíz de una serie de hechos que se vienen dando. Primero con el asesinato y posterior suicidio del preso de la alcaidía y ahora con el chico de 16 años que volvió a matar. La gente ve que después de un año de reclamos y pedidos de ASEC a los que están en el poder de turno, tanto a nivel local como provincial, se obtuvo poco en relación a lo mucho que falta. Entonces la sensación de desprotección cada vez es más grande, de que nada ha cambiado y ni siquiera tienen la intención de que algo cambie. En palabras bonitas y promesas se van todos los políticos de turno, sin distinción”.
No obstante, dijo, “quiero hacer una salvedad importante porque el jefe de policía (Gustavo) Schierloh ha hecho lo mejor que pudo con lo que le dieron, con lo que tiene a mano. Realmente ha cambiado la dinámica de la policía. Se ve más presencia en las calles, y una proactividad de la policía para salir a buscar a los delincuentes. Pero no alcanza. La mejor voluntad del mundo, con los mejores hombres, sino tiene los recursos, no alcanza”.
Recordó que el año pasado los funcionarios de la provincia organizaron una reunión “rimbombante presentando en los medios el 911 y las cámaras de seguridad en un plazo de seis meses. Pasaron 15 meses y todavía estamos esperando”.
Dijo que tampoco existe una partida en el presupuesto de este año que contemple la implementación del sistema 911. “Declararon desierto el segundo llamado a licitación sin dar ningún tipo de explicación. Creo que llamaron a licitación para dejarnos conformes y seguir pateando la pelota para adelante. Llega un momento en que uno se cansa de tantas promesas, de tantas mentiras”, sentenció Schmid.