Redes de Noticias

Llegó la hora de «hacer» / Emiliano Damonte Taborda

La aprobación de la ley de Bases y el paquete Fiscal son un certificado de maduréz para el Gobierno, que le da oxígeno y lo carga de responsabilidades; los números de junio fueron muy malos en todos los campos, la crisis productiva se profundiza y la esperada salida en forma de «V» ya no parece verosimil; economías regionales ahoracadas y necesidad de atención a la «Micro»; el enorme desafío de muñequear con la realidad y la hora de «hacer»

Guillermo Francos y Luis Caputo
Guillermo Francos y Luis Caputo

Esta columna tiene por premisa mantener una visión superficial de los acontecimientos que le permita mantenerse lejos de los detalles que al final nos terminan mareando. Mantener una escala lo más amplia posible es el objetivo de este analisis, ver las cosas como desde el aire, trazadas como un mapa facilmente legible. Hemos hablado tanto de la ley de Bases que terminamos perdiendo el hilo y la dimensión, pero sobre todo porque el hilo no fue muy claro, se pareció mucho a un “ir acomodándose a las lecciones que se aprendían” y la dimensión fue decreciente e inconstante. El proceso es bastante similar al de un niño buscando límites, éste primero pide todo, hace berrinches, amenaza, luego razona y transa y finalmente se contenta con lo que le conceden.

Desde todos los sectores, “dialoguistas” y un poco menos,  el mensaje fue claro: llegó la hora de hacer. 

Números muy difíciles

Los números de Junio para el Gobierno fueron muy malos en todos los campos. En la Macro, el riesgo país subió 144 puntos, más de 300 desde el mínimo de fines de abril y más allá del veranito que mostró la aprobación en el Senado de Ley de Bases y paquete que terminó constituyendo la única señal por parte del Mercado. La aprobación final ya estaba en los cálculos por lo que en definitiva no movió la aguja. A las condiciones actuales, el Cepo no pinta para ceder, y la subida del blue sitúa la brecha ya sólidamente por encima del 45%. 

Dice el Mercado que no alcanza

El Mercado, tan importante para muchos y que siempre debe ser tenido en cuenta, como quedó claro, no come vidrio. Ese veranito que significó la aprobación en el Senado fue rápidamente reabsorbido. Es como si hubieran dicho, «el camino es por ahí, pero no creo poder ganar mucho más con Argentina en estas condiciones, ahora hay que demostrar que se puede hacer algo»

Hacer un poco de Micro por amor del cielo

Las economías regionales sufren los mismos males que dejó Massa, el mismo destrato y la misma falta de atención de hace décadas. En Entre Ríos se están tirando a la zanja toneladas de cítricos que no tienen mercado debido a la pérdida de competitividad que las condiciones han ido generando de manera sostenida los últimos años. ¿La ley de Bases permitirá que el Gobierno se concentre en esos espacios? Hay una profunda necesidad de visión Micro en el país, alguien que se fije como produce hoy un chacarero con los caminos de mierda con los que debe lidiar, sin electricidad, víctima de aprietes sindicales y juicios, con una brecha cambiaria del 50 por ciento, complicado para importar insumos y maquinarias, habiendo perdido mercados externos y con un mercado interno deprimido. Puedo seguir hablando de la crisis de las economías regionales, uno de los motores de la economía que se han pisoteado y maltratado con más saña y desconsideración en el país históricamente, pero terminaría pareciendo una novela trágica. Alcanza con lo dicho.

Panorama peleagudo

El desafío que enfrenta entonces el Gobierno es monumental, la pesada herencia no ayuda, pero tampoco sirve de excusa. En junio se llevaron a cabo aumentos que se sentirán en los bolsillos ya desde el mes próximo, por lo que la inflación debería detener su caída por un tiempo, aunque la depresión permite esperar que no vuelva a aumentar por motivos que no tengan que ver con la necesidad de adecuar algunos mercados regulados como el energético. Este mes veremos qué ha pasado con los índices de actividad industrial y de la construcción, que en los meses precedentes han mostrado una caída general que no deja entrever en sus indicadores tempranos una recuperación a corto plazo (El tema de la “V” o la “L” como esquema de salida del pozo de la crisis). Planchar la economía no fue sencillo, sin dudas, hubo que tomar decisiones complejas y asumir un costo político que se vio compensado por el viento de cola electoral que traía el Gobierno. Pero sin dudas reactivar esta economía tras el planchazo, será mucho más difícil aún y la paciencia empieza a encontrar un límite. La aprobación de la ley de bases, fundamentalmente lo que permite preveer es una prolongación de ese crédito de paciencia que la gente le está dando al Gobierno. A partir de ahora, será necesario hacer algo más que dar discursos altisonantes o respuestas ocurrentes.

No hablaremos

No hablaremos hoy de las apariciones internacionales del Presidente, las críticas y los insultos a Lula y la ausencia de la cumbre del Mercosur anunciada. No queremos perder el hilo de esta verdadera prueba de maduréz que fue la Ley de Bases para el Gobierno de Javier Milei, para el que Ahora llegó la hora de mostrar gestión.

Mientras tanto, solidaridad, empatía, respeto por la dificultad del otro, generosidad y paciencia, espíritu crítico que más no se pueda, ojos abiertos y equilibrio emocional, les augura El Aguijón.
Facebook
Twitter
WhatsApp